05 de Septiembre #2013
En honor a San Antonio María Sacaría (+ 1539)
Dr.
César Mella
Vía correo electrónico
Ciudad,
Ref.: http://www.elcaribe.com.do/2013/09/05/psiquiatra-propone-iglesia-eliminar-celibato
"En buena ley, la diferencia entre un sacerdote y un casado es sólo una mujer. El diagnóstico apunta, más que al celibato, a la castidad y a la fidelidad; y es válido tanto para el sacerdote como para cualquier otra persona, cualquiera que sea su situación."
Distinguido Dr. Mella, buenas tardes.
"Suprimir el celibato y permitir el matrimonio al sacerdote no garantiza la castidad ni la fidelidad, como tampoco evita el incesto, las violaciones, etc., problemas de todos los días en nuestra sociedad."
Luego de saludarle cordialmente, he querido escribirle para compartir esta inquietud que me ha producido leer a un profesional de su talante expresarse públicamente de tal forma.
"El psiquiatra César Mella atribuyó parte del desvió de la conducta sexual de sacerdotes católicos a la práctica del celibato y opinó que la sotana no le quita a los curas el deseo sexual propio de los hombres y mujeres."
Ayer hablaba yo con un ingeniero sobre los famosos "vicios de construcción" tan populares hoy en todo tipo de edificaciones, y no por ello tenemos a menos a tantos excelentes profesionales en la rama; hasta que se caiga uno que otro edificio en la ciudad y tengamos una catástrofe.
Ni hablar de los profesionales de la salud, con tantos y tantos casos de mala práctica, incluso muertes, y no por ello dejamos de acudir a estos cuando la salud flaquea; mucho menos sugerir un cambio en el tipo de entrenamiento que reciben.
No hace mucho estuve asistiendo a una comunidad Al-Anon, para familiares y amigos de adictos, donde escuché el testimonio de un médico que consumía narcóticos (rohypnol) antes de entrar a cirugía, "seguro de lo que estaba haciendo", decía él.
¿Usted se imagina?
Me iba a referir a la política pero puedo decir algo imprudente, y no es el caso.
La debilidad humana es un verdadero misterio, cómo nos afecta.
Lo extraño es que se manifieste en hombres que desde que eligieron el camino a seguir, por mas de una década, son entrenados para servir a su comunidad de la forma más extraordinaria e inimaginable posible.
Con esto no quiero excusar ni interceder en favor de ningún criminal, pero de ahí a decir que todos merecen o padecen de esto, aquello o lo otro, es injusto y poco atinado afirmar.
Por más de dos mil años la enseñanza de Jesús ha sido la misma: el sacerdote entregado a La Iglesia -como su esposa- de la misma manera como usted se entregó a la suya en fidelidad hasta la muerte.
De que hay hombres que nunca debieron ser Sacerdotes, lo admito, no tenían condiciones para ello, y es por esta razón que hemos sido testigos de algunas locuras. Pudiéramos decir lo mismo del matrimonio? Claro que si.
Conozco a muchos Sacerdotes felices y contentos con la misión que el mismo Dios les ha confiado, pastorear a sus ovejas.
Usted, como profesional de la salud y la conducta, sabe mucho mejor que yo que el hombre en su miseria es capaz de cualquier cosa, desde lo sublime hasta lo ridículo. No hay que ser un genio para comprender esto.
Una mirada a nuestro alrededor lo confirma, estamos abocados a un desastre y La Iglesia católica y sus miembros estamos trabajando duro para evitarlo.
Ayúdenos por favor.
Con atentos saludos,
Mario R. Saviñón
"La sexualidad, o se la ve desde la condición de seres humanos, o nos puede convertir en bestias."
"En buena ley, la diferencia entre un sacerdote y un casado es sólo una mujer. El diagnóstico apunta, más que al celibato, a la castidad y a la fidelidad; y es válido tanto para el sacerdote como para cualquier otra persona, cualquiera que sea su situación."
Distinguido Dr. Mella, buenas tardes.
"Suprimir el celibato y permitir el matrimonio al sacerdote no garantiza la castidad ni la fidelidad, como tampoco evita el incesto, las violaciones, etc., problemas de todos los días en nuestra sociedad."
Luego de saludarle cordialmente, he querido escribirle para compartir esta inquietud que me ha producido leer a un profesional de su talante expresarse públicamente de tal forma.
"El psiquiatra César Mella atribuyó parte del desvió de la conducta sexual de sacerdotes católicos a la práctica del celibato y opinó que la sotana no le quita a los curas el deseo sexual propio de los hombres y mujeres."
Ayer hablaba yo con un ingeniero sobre los famosos "vicios de construcción" tan populares hoy en todo tipo de edificaciones, y no por ello tenemos a menos a tantos excelentes profesionales en la rama; hasta que se caiga uno que otro edificio en la ciudad y tengamos una catástrofe.
Ni hablar de los profesionales de la salud, con tantos y tantos casos de mala práctica, incluso muertes, y no por ello dejamos de acudir a estos cuando la salud flaquea; mucho menos sugerir un cambio en el tipo de entrenamiento que reciben.
No hace mucho estuve asistiendo a una comunidad Al-Anon, para familiares y amigos de adictos, donde escuché el testimonio de un médico que consumía narcóticos (rohypnol) antes de entrar a cirugía, "seguro de lo que estaba haciendo", decía él.
¿Usted se imagina?
Me iba a referir a la política pero puedo decir algo imprudente, y no es el caso.
La debilidad humana es un verdadero misterio, cómo nos afecta.
Lo extraño es que se manifieste en hombres que desde que eligieron el camino a seguir, por mas de una década, son entrenados para servir a su comunidad de la forma más extraordinaria e inimaginable posible.
Con esto no quiero excusar ni interceder en favor de ningún criminal, pero de ahí a decir que todos merecen o padecen de esto, aquello o lo otro, es injusto y poco atinado afirmar.
Por más de dos mil años la enseñanza de Jesús ha sido la misma: el sacerdote entregado a La Iglesia -como su esposa- de la misma manera como usted se entregó a la suya en fidelidad hasta la muerte.
De que hay hombres que nunca debieron ser Sacerdotes, lo admito, no tenían condiciones para ello, y es por esta razón que hemos sido testigos de algunas locuras. Pudiéramos decir lo mismo del matrimonio? Claro que si.
Conozco a muchos Sacerdotes felices y contentos con la misión que el mismo Dios les ha confiado, pastorear a sus ovejas.
Usted, como profesional de la salud y la conducta, sabe mucho mejor que yo que el hombre en su miseria es capaz de cualquier cosa, desde lo sublime hasta lo ridículo. No hay que ser un genio para comprender esto.
Una mirada a nuestro alrededor lo confirma, estamos abocados a un desastre y La Iglesia católica y sus miembros estamos trabajando duro para evitarlo.
Ayúdenos por favor.
Con atentos saludos,
Mario R. Saviñón
"La sexualidad, o se la ve desde la condición de seres humanos, o nos puede convertir en bestias."