"La sociedad las sentencia a quedar embarazadas porque no le ofrece una educación sexual con herramientas de prevención sino orientaciones que no se corresponden con su realidad."
http://www.clavedigital.com/App_Pages/opinion/Firmas.aspx?Id_Articulo=12796&Id_ClassArticulista=208
Distinguida Sra. Vargas, buenas tardes.
Un breve comentario a su artículo publicado en Clave digital, algunas ideas sobre estas dos afirmaciones suyas.
La sociedad la componemos todos, por lo que todos -en cierta forma- somos responsables de cuanto sucede a los más jóvenes, haber permitido convertir el sexo en el deporte nacional favorito de una mayoría de dominicanos.
Ciertamente el sexo es importante, eso es, entre dos personas unidas para siempre por el sagrado vínculo del matrimonio, pero para los muchachos, personas solteras que apenas saben lo que significa asumir algún tipo de compromiso en esta vida, hablar de sexo y mucho más, de promiscuidad sexual, es llamar al mismo Diablo para que venga a visitarnos, un suicidio.
Y eso observamos con preocupación, la forma como se induce a los más pequeños en nuestra sociedad a fornicar, por medio de la prensa, la radio, la televisión, la música, por ojo, boca y nariz.
Es como si el sexo se haya convertido en sinónimo de libertad, para terminar la mayoría adictos a ello, tanto jóvenes como adultos.
Una supuesta libertad que se convierte muy fácilmente en libertinaje.
"Pareciera que este panorama se puede empeorar. Ya que con la propuesta de reforma de la constitución y la introducción del artículo 30 se produciría que el uso de métodos anticonceptivos como el DIU, el mirena y los anticonceptivos de emergencia pasarían a la ilegalidad."
Esta afirmación suya la habíamos escuchado la semana pasada, de boca de una abogada extranjera y de una ginecóloga dominicana, la cual nos sirve para sustentar nuestra postura respecto al hecho de que estos productos químicos, que vemos anunciados con regularidad en ciertos medios de comunicación, no es que serán ilegales de aprobarse la reforma constitucional como está redactada, sino que son ilegales ahora mismo, por el simple hecho de que el aborto es ilegal en nuestro país, y tanto el DIU, la MIRENA como las píldoras abortivas del día después, EVITAL, CITOTEX, etc., lo causan.
Algunas farmacéuticas se han burlado de nuestros legisladores, se burlan de nuestra ley, simple y sencillamente porque en este país no hay ministerio público que haga que las mismas se cumplan. Eso si que es algo terrible.
Pero eso lo trataremos en otra oportunidad.
Mientras tanto, le anexo esta carta de un reconocido gineco-obstetra de Santiago, alarmado por lo que atestigua en su propia consulta, así como un artículo sobre el preservativo y el aumento del SIDA, posible causa también de tantos embarazos.
Una niña con veinte años hoy, aún soltera, probablemente ha tenido relaciones sexuales con más de cinco muchachos distintos: esa es la causa del cáncer del cervix. Ni hablar de la propagación de numerosas enfermedades de transmisión sexual tan terribles como el SIDA, que afectan a nuestros hijos hoy.
En días pasados leía lo que sucede al anochecer en un parque céntrico de la ciudad de Barcelona, cómo en el entran cientos de hombres y mujeres a formicar indistintamente con el primero que encuentren.
¿Usted se imagina lo que sale de ese parque después de tal aventura?
Pues aquí sucede algo parecido todas las noches cuando nuestros hijos salen de los numerosos moteles alrededor de la ciudad, destruidos, física, moral y espiritualmente.
Sobre estas cosas escribiremos también.
Con atentos saludos,
Mario R. Saviñón
"El derecho a la vida es inviolable desde la concepción hasta la muerte. No podrá establecerse, pronunciarse ni aplicarse, en ningún caso, la pena de muerte."
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